Fisting o Fistear, es la práctica sexual de introducir el puño por el ano o la vagina. A la mayoría de las personas le desagrada bastante, aunque si lo miramos de una manera objetiva no es mucho más raro que el sexo habitual. Su mecánica y su violencia implícita provocan en la práctica del Fisting una aversión que ha logrado estigmatizar esta práctica.
El slamming combina largas sesiones de folleteo bruto y chutes de mefedrona, MDMA o crystal meth por vía intravenosa durante varios días. Te lo contamos todo y podrás ver la moda que está surgiendo en las redes sociales, brutal!