Músculos, fetiches, razas e innumerables posiciones sexuales han sido ya cumplidas para el exigente público gay cada vez más demandante de buenos contenidos en el mundo porno. En este sector, los actores de las cintas para adultos ya son considerados más que estrellas de rock, pero ¿qué le espera al futuro del porno gay? Sin sonar moralista, es una sorpresa confirmar que sea la comunidad trans los que comanden esta nueva era de entretenimiento para adultos.  

Pasando por las categorías de latinos, daddy’s, twinks, gang bang, o fisting, hoy parece que la comunidad gay ha decidido compartir similitud de gustos con los hombres heterosexuales, por lo menos, los del continente americano. Mientras que a los heteros en sus búsquedas favoritas se encuentran las palabras “mujeres con pene”, para los hombres gay ahora se encuentran los “hombres con vagina”, así es.

¿A qué me refiero con “hombres con vagina”? Dos palabras: chicos transexuales. En concreto, son aquellas personas que nacieron identificados como mujeres por su composición biológica pero, llevaron a cabo una serie de procesos y transformaciónes físicas y mentales para identificarse actualmente como varones.

Fantasía, morbo y excitación son conductas que han llevado a estos cibernautas a buscar este tipo de materiales audiovisuales donde gustan de observar como practica el sexo una persona que mezcla las anatomías de los dos géneros: masculino y femenino. Curioso que sea dentro de esta industria donde se generen el doble de ingresos económicos que en las descargas de música.

Sitios como Jock Pussy y su actor estrella Luke Hudson, o Transpassword y su actriz Karla Carrillo -ambos transexuales-, apuestan por este tipo de mercado que ha confirmado que el porno sirve como ejemplo de adaptación a la modernidad, de innovación y de progreso tecnológico. En México nos encontramos situados entre los diez primeros países de todo el mundo que ven pornografía a través de internet, dedicando 9 minutos de cada sesión en una página porno, gastando aproximadamente 6 mil pesos al año en esta realidad alterna que asegura, en la mayoría de los casos, satisfacer sus pensamientos más prohibidos sin temor a ser juzgados ¿Será esto solo el inicio de aquella libertad sexual que por tanto tiempo se nos ha negado?

A continuación les presentamos a otros 5 actores trans que hacen porno gay y que debes conocer:

1. Luke Hudson

Hudson es de Kansas y decidió comenzar a actuar frente a la cámara para pagarse la escuela. De joven hacía hockey y atletismo. También toca la guitarra y es un gran fanático de David Bowie. Hudson afirma haber estado una vez en un trío de 24 horas (fue activo y pasivo) con otra estrella porno, y dice que le encanta ser activo con ayuda de su dildo favorito, “The Thunderstick“. Él es parte del estudio Jockpussy (enlace NSFW).

2. Cyd St. Vincent

Vincent no sólo es un actor en Bonus Hole Boys (enlace NSFW), sino también el administrador de talentos del sitio. Vive en la ciudad de Nueva York, le gusta hacer senderismo y de vez en cuando usa sus redes sociales para hablar sobre temas políticos, como los esfuerzos de socorro para el reciente terremoto en México y la reforma de salud.

3. Jade Philips

Phillips es un exhibicionista autoproclamado que también es parte del estudio Bonus Hole Boys, es versátil y le gustan los deportes acuáticos. También es fan del acro-yoga, una forma de yoga que combina gimnasia, volteretas, acrobacias y algunos movimientos aéreos. Él apareció en una lista de actores porno afroamericanos trans del momento y en una reveladora entrevista. Él ve su trabajo frente a la cámara como una forma de protestar la transfobia y ayudar a las personas trans jóvenes a aceptarse a sí mismos.

4. James Darling

Darling creció dentro de una familia religiosa en Atlanta, Georgia. Vive en Oakland, California, y aprecia la fuerte y radical comunidad queer de allí. Comenzó a actuar en el porno en 2009 y comenzó a dirigir en 2012. Él es el fundador del sitio FTM Fucker (enlace NSFW).

5. Buck Angel

La lista de actores trans que hacen porno gay no estaría completa si no incluimos a la superestrella, Buck Angel. Angel es un pionero que tuvo dificultades para volverse reconocido en el mundo de la pornografía, ya que los estudios no estaban seguros de qué hacer con él. Y también se encontró con comentarios negativos que lo culpaban por permitirle a los cisgénero fetichizar sus cuerpos trans. Él se considera un activista en pro de la sexualidad y de la comunidad trans.

Angel ha aparecido desde entonces en dos documentales sobre sí mismo (Sexing the Transman y Angel), y su presentación educativa “Bucking the System” tiene el lema “Lo que está entre tus piernas no es lo que te define”.

Por otro lado, en los últimos diez años, la industria de juguetes sexuales se ha convertido en un mercado de 15.000 millones de dólares y se cree que va a alcanzar los 50.000 millones para el año 2020. Hoy en día, existen todo tipo de juguetes para satisfacer cualquier perversión o fetiche y el tabú cultural que los rodea ha desaparecido. Por eso resulta tan difícil creer lo que dice el carismático activista trans e incansable emprendedor Buck Angel cuando afirma que “no se ha hecho un sólo juguete para hombres trans en toda la historia del mercado de juguetes para adultos”.

Pero esto ha cambiado con la llegada de un nuevo juguete a nuestro Sex Shop: el Buck-OFF, un juguete de masturbación que está diseñado específicamente para las personas trans que pasaron —o están pasando por la transición— de ser mujeres a hombres. El dispositivo, distribuido por el fabricante de juguetes sexuales para hombres, Perfect Fit, es creación de Angel y le tomó casi cinco años desarrollarlo. Su adición representa un cambio radical en la industria de los juguetes sexuales, uno que podría sentar los precedentes para que los inversionistas y fabricantes amplíen sus horizontes más allá de los strap-ons y los columpios.

En este vídeo el mismísimo Buck Angel te explica su uso:

El Buck-OFF está diseñado para personas que están tomando o han tomado testosterona como parte de su tratamiento de transición de mujer a hombre, la cual normalmente produce el efecto de agrandar los genitales. El Buck-OFF se parece a otros juguetes para masturbación en su diseño básico pero hay dos diferencias claves: es más corto y más amplio que otros juguetes y crea succión. Eso permite que los hombres trans se masturben con mayor facilidad y también ayuda a controlar la disforia de género que podría presentarse al usar otros juguetes.

Muchas personas que ya vivieron o están viviendo el proceso de transición de mujer a hombre “no quieren tocar sus genitales”, dice Angel. “Se disocian de sus vaginas porque no les parecen masculinas. Cuando pasas por esa transición, quieres tener un pene, quieres sentirte como hombre y por eso no quieres tocar tu vagina”. El Buck-OFF “te permite masturbarte sin tocar tu vagina”.

Así mismo en nuestro Sex Shop podrás encontrar también Packers o Prótesis de Paquete, así como arneses y protesis duales para marcar paquete y orinar, todo de la prestigiosa marca PACKER GEAR. Echa un vistazo desde aquí.